Una experiencia creada para quienes desean disfrutar del placer con elegancia y seducción.
El ritual comienza con una copa de cava o vino espumoso, compartida en un ambiente íntimo, con música suave y luz tenue.
Después, se inicia un masaje tántrico y sensual cuerpo a cuerpo, donde los movimientos lentos, los aceites aromáticos y el contacto piel con piel despiertan todos los sentidos.
Un encuentro que combina placer, relajación y sofisticación, ideal para celebrar una ocasión especial o simplemente rendirse al arte del deseo.